Pirineos

Situado a más de 1.000 metros de altitud, el Pirineo catalano-francés es conocido por su diversidad y belleza paisajística, así como por su infinidad de posibilidades a nivel deportivo, cultural y gastronómico. Aquí os damos unos consejos para disfrutar de los Pirineos durante los meses de buen tiempo.

En una tierra dónde las ciudades brillan por su ausencia y la tecnología parece quedarse en los bolsillos de los visitantes, a 150 km de Barcelona, las caminatas son casi un punto obligatorio, ya que la topografía de la zona ofrece la posibilidad de andar a tu gusto. Si eres amante de la naturaleza es obligatorio que visites algunos lagos próximos a la zona, tales cómo el lago del Matemale o el lago de Meranges.

En bicicleta, tanto por montaña cómo por carretera, la Cerdanya ofrece miles de rutas que jamás te acabarás. En esta zona puedes pedalear en verano sin sudar más de la cuenta, dada la suave temperatura de la que sé disfruta, sin olvidar que a 20 min de Puigcerdà se encuentra uno de los mejores “bikeparks” de España, el de La Molina, cuya estación de esquí en verano abre sus pistas para que puedas hacer descenso en bicicleta.

Sí tu pasión es la escalada, La Cerdanya te cautivará, ya que cuenta con un sinfín de zonas de escalada; clásica, deportiva o bloque. También encontrarás un rocódromo gratuito en Bellver de Cerdanya.

Si te gustan los deportes acuáticos, la zona ofrece un sinfín de actividades como piragüismo, rafting, barranquismo e incluso vela en algunos lagos.

¿Tus expectativas van más enfocadas al relax? A 32 Km de Puigcerdà se encuentran los baños de St Thomas, unas piscinas de agua caliente que emana del corazón de la tierra, así como los baños de Llo y Dorres. También puedes disfrutar del pintoresco tren amarillo, que a un paso moderado te permite observar la majestuosidad de la Cerdanya.

En definitiva, La Cerdanya es una apuesta segura, dada la gran cantidad de actividades saludables que ofrece, el maravilloso paisaje, el aire fresco y la tranquilidad.

¡Ven y respira!